¿Se fortalece el sistema inmunitario después de un resfriado?
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El sistema digestivo es una puerta de entrada a la salud. Según muchos especialistas médicos, la raíz de la mayoría de las enfermedades es un sistema digestivo débil. En nuestro intestino hay algunos microorganismos beneficiosos que defienden al cuerpo de diferentes infecciones y también apoyan al sistema inmunitario del organismo. Pero si notas diarrea frecuente, estreñimiento, hinchazón, etc., puede ser un signo de agotamiento del sistema inmunitario.
Si nota alguno de estos 10 signos, puede ser un indicador de un sistema inmunitario debilitado. Pero la buena noticia es que hay muchas formas naturales de mejorar su inmunidad general y tomar el control de su bienestar.
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Nuestro sistema inmunológico actúa como guardián de nuestro cuerpo, protegiéndolo de las fuerzas dañinas del entorno y es fundamental para nuestra supervivencia. Este sistema de defensa está compuesto por varios órganos, células y proteínas. Después del sistema nervioso, la estructura inmunitaria es el sistema más complejo de nuestro cuerpo.
Cuando nuestro sistema inmunitario funciona correctamente, no lo notamos, aunque está trabajando las 24 horas del día para mantenernos en un estado de salud óptimo. Sin embargo, cuando nuestro sistema inmunológico está comprometido, no puede proteger al cuerpo al mismo nivel de organismos invasores, y esto nos pone en riesgo de enfermedades infecciosas, enfermedades debilitantes e incluso aumenta el riesgo de muerte1.
El estrés fue diseñado como una respuesta de lucha o huida ante el entorno de nuestros antepasados. Si se acercaba un tigre, el cuerpo de nuestros ancestros liberaba una compleja mezcla de hormonas y sustancias químicas como la adrenalina, el cortisol y la norepinefrina para preparar nuestro cuerpo para la acción física. Esto provocaba ciertas reacciones, como un mayor flujo de sangre a los músculos y el cierre de otras funciones como el sistema digestivo.
Signos de un buen sistema inmunitario
OverviewLos trastornos de inmunodeficiencia primaria -también llamados trastornos inmunitarios primarios o inmunodeficiencia primaria- debilitan el sistema inmunitario, lo que permite que se produzcan infecciones y otros problemas de salud con mayor facilidad.
Muchas personas con inmunodeficiencia primaria nacen sin algunas de las defensas inmunitarias del organismo o con el sistema inmunitario sin funcionar correctamente, lo que les hace más susceptibles a los gérmenes que pueden causar infecciones.
Hasta ahora, los investigadores han identificado más de 300 formas de trastornos de inmunodeficiencia primaria. Algunas formas son tan leves que pueden pasar desapercibidas hasta la edad adulta. Otros tipos son tan graves que se descubren poco después de que nazca el bebé afectado.
Los tratamientos pueden reforzar el sistema inmunitario en muchos tipos de trastornos por inmunodeficiencia primaria. La investigación está en curso, lo que permite mejorar los tratamientos y la calidad de vida de las personas con esta enfermedad.Productos y serviciosMostrar más productos de Mayo Clinic
SíntomasUno de los signos más comunes de la inmunodeficiencia primaria es tener infecciones que son más frecuentes, más duraderas o más difíciles de tratar que las infecciones de alguien con un sistema inmunitario típico. También puede contraer infecciones que una persona con un sistema inmunitario sano probablemente no contraería (infecciones oportunistas).
Prueba del sistema inmunológico
Algunas cosas pueden debilitar nuestro sistema inmunitario, como la mala alimentación, el estrés, la falta de sueño, el tabaquismo, el consumo de alcohol o la existencia de otras enfermedades subyacentes. Si experimenta alguno de los seis síntomas siguientes y no sabe por qué, es posible que su sistema inmunitario no esté funcionando tan bien como podría.
Una gran parte del sistema inmunitario se encuentra en el sistema digestivo, incluidos los intestinos. Si tiene problemas estomacales todo el tiempo, como estreñimiento, diarrea y gases, podría significar que algo está pasando con su sistema inmunológico. Esto es especialmente cierto si estos problemas duran semanas.
Una persona media tiene uno o dos resfriados al año. Si tiene más de tres, puede tener un sistema inmunitario débil. Si sólo tiene dos o tres pero no se siente mejor en una semana o 10 días cada vez que tiene uno, esto también podría ser un signo de un sistema inmunológico débil.
Lo mismo ocurre si te cansas con facilidad. Intenta cambiar tus hábitos de sueño. Tómate un descanso de las situaciones estresantes, como el trabajo. Dedica tiempo a hacer cosas que te gusten. Si sigues sin tener energía, puede ser el momento de hablar con un profesional médico.
